Chin pum!

Hoy me acordaba de que me acuerdo el momento exacto en que mi primer novio me pidió por primera vez que seamos novios. Me acuerdo de que Meli se estaba bañando porque volviamos de la última guerra de harina y huevo y sonó el Tananá tá tá tá tananananá, ah! sí, fue por sms. Había peor manera de empezar? Igual era un comienzo, a mi me encantaba, me puse tan feliz, tan colorada, tan hiperquinética que no le contesté y cuando me llamó le dije que no me había llegado ningun mensaje de él. Bien boluda, bien!. Un mes y medio después me lo volvió a pedir por teléfono y no había forma de evitarlo (por qué lo evitabas, Lara?).

Ahora... me pidió por primera vez que seamos novios? Sí, porque me lo pidió como... 3? 4 veces distintas... En el mismo trimestre (me cortaba y aguantaba una semana o un poquito más). Idiota, vos le decías que sí siempre! Y al final se fue con Meli.

Ojalá no lean esto, pero Lali... A qué vas? No sé... Qué jovenes eramos! Como cambié.