Los últimos días del año tienen siempre una energía rara. Pero es una energía linda, una energía que une, que nos hace decir leleces, que nos pone melancólicos. Una energía que nos hace recordar, recordar cosas buenas y malas, cosas buenas que pasaron y cosas buenas que quedaron, cosas malas que pasaron y cosas malas que quedaron, pero que van a pasar, todo es superable. Recordar esta re bueno. Es una energía que nos hace recordar y agradecer, primero agradecerle a Dios por poder recordar, agradecer por lo que recordamos, agradecer a los que forman parte de lo recordado y agradecer a los dueños de los recuerdos en los que estamos etiquetados, agradecer a los que nos tienen en sus recuerdos. Estamos hablando de una energía que planea, planea un futuro, un año entero, una energía que planea mientras recuerda y que quizás planea cosas que no van a pasar. Es una energía que llena, definitivamente llena.
Es una energía que llena de energía y que quizás está hecha para poder empezar el año con todo.
Igualmente yo venía a decirles Feliz Navidad! Y a sostener que para mí, la Navidad es eso, es energía. Porque seas Cristiano o no, algo te llama a festejar, a reunirte con tu familia, con tus amigos, algo te llama a regalar, algo te llama a abrazar o a extrañar. Y por ahí no, no te gusta reunirte con tu familia y regalarles cosas, pero si te gusta y algo te llama a salir a la noche, a tomar, a tirar fuegos artificiales, a boludear hasta tarde y que al otro día sea feriado. Navidad es energía que llena también, uno siempre espera la Navidad y siempre desea Feliz Navidad.
Espero que hayan tenido una Feliz Navidad, como sea que la hayan pasado.